REGRESO AL FUTURO
Había una vez un jardín en el que vivían una niña con su tortuga y un perro. En el jardín también había un hormiguero lleno de hormigas pero había una que era más lista y más trabajadora que las demás. Su nombre era Hormitrabajadora.
Una tarde de otoño, la hormiga estaba recogiendo comida para pasar el invierno, cuando de repente una enorme cosa se le puso delante. Era Tortuguina. La hormiga asustada salió corriendo hacia su hormiguero y Tortuguina la persiguió gritando:
- ¡Tranquila, tranquila! No te voy a hacer nada, quiero ayudarte a recoger comida para el invierno.
Entonces, Hormitrabajadora se dio la vuelta y le dijo:
- ¡Tengo una idea! Si quieres ayudarme a recoger comida podemos hacer una cosa. Podemos construir un carro con tu caparazón. Ahí pondremos toda la comida y tú la llevarás más rápido al hormiguero. Así todos mis compañeras trabajadoras se pondrán muy contentas.
- ¡Sí! Me parece una idea genial. Vamos a buscar palos para hacer el carro, pero tienes que darte cuenta de que yo voy muy despacito e igual no puedo llevarlo a tiempo. - Dijo Tortuguina un poco triste.
- No te preocupes llevaras más comida que yo porque yo la llevo de uno en uno.
Fue entonces cuando las dos se pusieron manos a la obra cogiendo palitos para construir el carro en el caparazón de Tortuguina.
Cuando lo terminaron lo llenaron de comida y lo llevaron al hormiguero. Todas las compañeras de Hormitrabajadora se pusieron muy contentas y organizaron una fiesta para Tortuguina como muestra de agradecimiento por su ayuda.
Álvaro, 4º B
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